Producción y características de la leche materna
Para poder tener un correcto manejo de la lactancia, es importante conocer la parte más teórica, así muchas de las dudas más frecuentes que tenéis pueden desaparecer.
En la producción de la leche materna se ven implicados tanto los pechos como algunas hormonas. A continuación explicamos de forma sencilla los principales responsables.
PARTE EXTERIOR DEL PECHO
En esta parte intervienen tanto el pezón como la areola.
El pezón
Es el referente táctil para que el pequeño pueda encontrar la comida fácilmente y sirve como salida de la leche al exterior. Este no produce la leche materna, por tanto, no existen casos en los que la forma del mismo haga que no se pueda conseguir una lactancia exitosa.
Los pezones planos o invertidos no son una excepción, en estos lo más importante es realizar una buena técnica desde el principio o usar pezoneras en los casos que sean necesarias.
La areola
Es la parte oscura que rodea el pezón. Habréis notado que se ha oscurecido más durante el embarazo, la razón es que los recién nacidos no tienen una visión muy correcta pero detectan bien los contrastes. Por ello, la diferencia entre el color del pecho y la areola hace que les sea más fácil detectarla después del parto para empezar a mamar.
La areola no interviene directamente en la lactancia pero es una referencia sobre el agarre del pequeño. Por tanto, su tamaño no está implicado en conseguir o no una lactancia materna exitosa.
En la misma areola se pueden ver unos pequeños bultitos, a veces de color blanco, de aspecto parecido a granitos. Estos se llaman corpúsculos de Montgomery y su función es la de lubricar e hidratar el pezón. El líquido que contienen es similar al amniótico y esto facilita que, junto al color de la areola, el bebé pueda localizar el alimento después del parto.
PARTE INTERIOR DEL PECHO
Está organizado en acinos, dentro de los cuales se encuentran los alveolos que son los encargados de la producción de la leche. Estos últimos están rodeados de fibras musculares, que responden a la acción de la oxcitocina como veremos a continuación. De los alveolos salen los conductos que dirigirán la leche al pezón.
El tamaño del pecho no tiene influencia en la producción de leche, por ello, cualquier pecho es capaz capaz de producir la cantidad de leche que el bebé necesita.
HORMONAS ENCARGADAS
Hay muchas hormonas encargadas de la lactancia, pero depende principalmente de la oxitocina y la prolactina, complementadas por una proteína llamada Factor Inhibidor de la Lactancia (FIL).
Oxitocina
Como hemos visto, la oxitocina se encuentra en las fibras musculares que rodean los alveolos. Cuando se segrega esta hormona se produce una contracción muscular que extrae el contenido de los alveolos. Por eso, se dice que la oxitocina es la encargada de la salida de la leche.
Lo curioso de esta hormona, es que no solo responde al estímulo de succión del pequeño, sino que también se segrega al oírle llorar, oler su ropa e incluso al pensar con él o ella.
Además, tiene otras funciones importantes:
- Aumenta la temperatura de la mama y, por tanto, calienta al recién nacido.
- Reduce la ansiedad de la mamá y fomenta su tranquilidad.
- Se cree que es la encargada del instinto de protección materno, de los cuidados maternales y, por ello, se la llama “hormona del amor”.
El problema de esta hormona es que se puede bloquear por sentimientos como el miedo y la falta de confianza en una misma, o por sustancias externas como el alcohol. Todo ello puede llegar a dificultar las tomas.
Prolactina
Es la que da la orden a los alveolos para que produzcan leche, por tanto, es la responsable de la fabricación de leche. La prolactina solo se libera cuando el bebé mama, por eso es tan importante fomentar la succión del pequeño a demanda y sin restricciones.
Las tomas nocturnas hacen que el cuerpo tenga niveles más altos de esta hormona, por ello, no hay que dejar de darle el pecho de noche o disminuir la frecuencia las primeras semanas.
Las mamás que tenéis más de un bebé no debéis preocuparos por la cantidad de leche, ya que como hay más estimulación se produce más cantidad de prolactina y más fabricación.
Cuanto más succione el bebé, más cantidad de leche se produce.
Factor Inhibidor de la Lactancia (FIL)
El FIL inhibe la lactancia y se encuentra presente en la leche. Cuando el bebé mama, lo saca del pecho y, por ello, la leche se fabrica rápidamente durante las siguientes horas. Si el bebé no mama suficiente, esta proteína hará que no se fabrique mucha más.
¿CÓMO PRODUCIR MÁS LECHE?
Durante la lactancia, la mayoría de mujeres dudan sobre su producción de leche. Habitualmente es una sensación subjetiva que no se ajusta a la realidad. A pesar de ello, conduce en muchas ocasiones al abandono de la lactancia.
Existen algunos casos en los que sí hay menos producción de leche, los veremos en el capítulo sobre hipogalactia, pero son la gran minoría.
En algunos momentos concretos, el bebé está en una fase de crecimiento rápido. Mientras esta dura el pequeño demanda mucho más pecho de lo habitual y parece que se queda con hambre, esto se denomina crisis de lactancia o de crecimiento. Pero no es debido a una disminución en la producción de leche.
Como hemos visto, la cantidad de leche que fabricamos se debe a la succión del bebé. Por tanto, si creemos que se queda con hambre el bebé lo que debemos hacer es ponerle continuamente al pecho ya que esto provocará un aumento de producción.
Si realmente existe una baja producción, deberías concertar una cita y así podemos valorar exactamente dónde está el problema y buscar las soluciones específicas. Pero tenemos que concienciarnos que la mejor manera de aumentar la producción es que el bebé:
- Coma a demanda, sin restricciones
- Realice un buen agarre al pecho
- Lo vacíe correctamente
¿SE PUEDE AUMENTAR LA PRODUCCIÓN CON ALIMENTOS O FÁRMACOS?
En todas las culturas existe la creencia de que ciertos alimentos o bebidas provocan un aumento en la cantidad de leche, por ejemplo, la cerveza. La realidad es que no existe ninguna evidencia científica de que esto sea eficaz.
También se venden medicamentos, llamados galactogogos, que afirman que aumentan la producción. Hay que ir con cuidado con estos fármacos, ya que la mayoría no son útiles e incluso pueden llegar a ser peligrosos.
Existen 3 galactogogos que sí que aumentan la producción. No obstante, estos fármacos deben usarse siempre bajo supervisión médica y durante un periodo de tiempo corto, ya que tienen efectos secundarios si no se usan correctamente. Los casos habituales en los que se usa son: mamás de bebés prematuros, si hay separación del bebé, en las relactaciones y en lactancia inducida (como pueden ser casos de adopción).
Estos fármacos son el último recurso, ya que si el problema es el agarre del bebé o los horarios rígidos estos no nos servirán de mucho.
COMPOSICIÓN
La leche se modifica a lo largo del tiempo para adaptarse a las necesidades específicas del bebé. Cada una de estas leches es válida y con los nutrientes que él o ella necesita. Tiene un gran contenido en agua, por eso, no hay que darle ningún líquido más hasta la alimentación complementaria.
Calostro
Es la primera leche y se empieza a fabricar durante el segundo trimestre de embarazo, aunque no siempre sea visible. Dura aproximadamente hasta el cuarto día posparto. Existe una creencia popular que afirma, erróneamente, que esta leche no es buena para el bebé.
El calostro es una leche densa, normalmente de color amarillento y que se fabrica en poca cuantía. Esto último no debe preocuparte, ya que le aporta muchas calorías en poquita cantidad. Además, los primeros días los bebés tienen el estómago muy pequeño, para que te hagas una idea, las primeras 24 horas de vida comen entre 5 y 7 mililitros por toma. También le ayuda en el vaciado intestinal y la eliminación de meconio.
La parte más importante del calostro es la gran cantidad de inmunidad que contiene y que se le transmite al bebé. Así conseguimos que desde las primeras horas de vida esté protegido contra algunas enfermedades.
Leche de transición
Después del calostro llega la leche de transición, que es la que produce la subida de leche y que los pechos se vuelvan molestos y turgentes. Ésta perdura hasta las dos semanas de vida del bebé, aproximadamente. Tiene un aspecto aún amarillento o anaranjado y es un poco menos densa que el calostro.
Leche madura
A partir de los 15 días, la leche se convierte en “madura” que es más líquida y blanca que las anteriores. Su contenido disminuye en proteínas y minerales, pero aumenta en grasas y carbohidratos. La composición de esta leche va cambiando con los meses.
A pesar de que también disminuye el contenido de inmunoglobulinas (las que le transfieren inmunidad al bebé), seguirá teniendo durante todo el tiempo que dure la lactancia. Además, si la mamá se pone enferma, las nuevas que adquiera también se le pasarán al bebé.
Como hemos visto, la leche cambia durante el tiempo que dura la lactancia, pero también lo hace en una misma toma. Al inicio tiene un color más grisáceo y aguado mientras que al final de la toma es más blanca por su alto contenido en grasa que es lo que más sacia al bebé. A pesar de ello, no debemos obsesionarnos con vaciar el pecho, simplemente que el bebé coma todo lo que quiera hasta que se canse.
RESUMEN
- Para aumentar la producción de leche materna hay que ponerse frecuentemente al bebé en el pecho, que los vacíe correctamente y que realice un buen agarre.
- No existen alimentos ni bebidas que aumenten su producción, para ello existen tres fármacos que deben ser tomados bajo supervisión médica y en casos puntuales.
- Durante los primeros días de vida, el bebé se alimenta del calostro que es una leche densa que le aporta muchas calorías e inmunidad.
- La leche se hace más fluida con los días, adaptándose a las necesidades del bebé.
- La leche cambia en una misma toma: Al inicio tiene un color más grisáceo y aguado mientras que al final de la toma es más blanca por su alto contenido en grasa que es lo que más sacia al bebé.
- Pezón: es por donde sale la leche y sirve como referente táctil para que el bebé encuentre la comida.
- Areola: es una referencia para saber si el bebé se está agarrando bien. Contiene los corpúsculos de Montgomery que son los que lubrican el pezón.
- Los alveolos producen la leche y por los conductos sale al exterior. El tamaño del pecho no afecta a la producción.
- La oxitocina es la responsable de la salida de la leche al exterior, mientras que la prolactina es la encargada de mandar las señales para que se fabrique.