Evolución del sueño
EVOLUCIÓN DEL SUEÑO
Como veremos a lo largo de este capítulo, el sueño de un bebé no es igual que el de un adulto. Con los meses ellos deben pasar por diferentes fases para evolucionar su sueño hasta llegar a dormir como nosotros.
En este apartado describiremos la parte más teórica, aunque sea la más densa es importante conocerla para poder aplicarla en la práctica y comprender los despertares nocturnos del bebé.
La ropa que usemos para dormir, nunca puede limitar los movimientos del pequeño
EL SUEÑO EN LOS ADULTOS
Describimos brevemente como es nuestro sueño, el que con el tiempo el bebé va aprendiendo. En el adulto existen 5 fases de sueño:
Sueño tranquilo (sueño no-REM): es la primera fase por la que pasamos cuando nos dormimos:
- Estadio I: es el momento en el que nos quedamos adormecidos. Si te preguntan si te has dormido probablemente dirás que no, aunque no te acuerdas de nada.
- Estadio II: es un sueño ligero, en el que podemos despertarnos ante cualquier ruido. Este estadio y el anterior suman casi el 50% del sueño diario.
- Estadio III: es de transición.
- Estadio IV: En este la respiración y los latidos del corazón se estabilizan. Todavía podemos movernos, pero la mente está en un sueño profundo y los músculos están relajados.
Sueño REM: Es el sueño en el que la mente está activa, pero el cuerpo se mantiene inmóvil. En este momento nuestro cerebro integra los aprendizajes del día y podemos soñar.
La suma de estas fases se considera un ciclo de sueño que dura entre 90 y 120 minutos. Estos ciclos se repiten a lo largo de la noche y al finalizar cada uno de ellos nos despertamos, aunque la gran mayoría de veces no somos conscientes.
Esto significa que los adultos nos despertamos por la noche mínimo cada 2 horas. Pero no nos acordamos al día siguiente ya que sabemos volver a dormirnos inmediatamente.
Llegar a dormirnos en seguida forma parte del aprendizaje del ser humano y esta parte es la que con el tiempo deben aprender los bebés, a volver a dormirse después de cada ciclo de sueño.
EL SUEÑO DE LOS 0 A LOS 3 MESES
Antes de nacer, especialmente en el tercer trimestre de embarazo, los bebés ya tienen momentos de vigilia (estar despiertos) y de sueño. Estos ciclos son muy parecidos a los del recién nacido, por lo que ellos ya nacen sabiendo dormir.
¿Cómo se organiza el sueño en estas edades?
En estos momentos, los bebés solo disponen de dos fases del sueño –activo y lento- que en total duran entre 50 y 60 minutos. Algunos se despiertan después de terminar el ciclo, pero la mayoría son capaces desde el nacimiento de juntar más de uno que es lo que le permite dormir más rato.
· El sueño activo -posteriormente se convertirá en sueño REM-
El bebé cuando se duerme pasa directamente a esta fase, al contrario que un adulto. En ella tiene la respiración irregular, mueve las extremidades, sonríe, hace muecas o puede hacer otros sonidos. Suele durar unos 15 o 20 minutos.
La fase de sueño activo –o REM-, como hemos dicho antes, sirve para integrar los aprendizajes. Los bebés reciben muchos estímulos durante el poco rato que están despiertos, con el sueño activo su cerebro aprovecha para asimilarlos y se produce la maduración cerebral.
En esta fase pueden despertarse más fácilmente.
· El sueño lento –posteriormente se dividirá en los 4 estadios-
Después del sueño activo, llega esta fase en la que la respiración es más regular, no se mueve, mantiene los ojos cerrados y no hace ruidos. Es un sueño más profundo que el anterior.
A partir del segundo mes de vida, empiezan a tener un sueño más profundo que los meses previos y parece que ya empieza a dormir mejor. Esto se debe a que durante el sueño tranquilo se han empezado a diferenciar los estadios III y IV del adulto, que son las de sueño más profundo.
Pero… ¡llegan los 3 meses! Ahora se despiertan con mucha facilidad, si escuchan cualquier sonido se ponen a llorar. Esto se debe a que se han iniciado los estadios I y II del sueño, que es el más ligero. Esto no debe confundirse con la regresión de los 4 meses.
¿Por qué se despiertan?
Que el sueño de los bebés sea con frecuentes despertares no es casualidad, se producen para satisfacer sus necesidades básicas.
· Comer
La necesidad más conocida es la de comer frecuentemente, eso previene que bajen de peso y que se produzcan bajadas de azúcar (hipoglicemias). Además, en los casos de la lactancia materna, la estimulación frecuente del pecho hace que se produzca más leche.
· Mantener cerca al adulto
Otro de los motivos por los que los bebés se despiertan frecuentemente responde a la necesidad de supervivencia, es algo innato presente desde el nacimiento. Ellos no pueden valerse por sí mismos y necesitan mantener a la madre cerca para poder comer, estar protegidos del peligro y poder desplazarse. Debido a esto, muchas veces que se despiertan llorando se calman solo por cogerle en brazos.
Durante los primeros meses –incluso años- de vida, la tranquilidad que le transmite el adulto al bebé le ayuda a conciliar mejor el sueño ya que también se le aporta confianza y serenidad. La necesidad de apego es muy importante para ellos y un gran regulador del sueño, no solo hasta los 3 meses de vida.
Esta es una de las razones por la que el porteo les tranquiliza tanto, están tan pegaditos a alguien que se sienten protegidos. Si es la mamá la que portea sabe que tiene el alimento cerca y, por tanto, no se siente en peligro. Por el contrario, en la cuna no sienten esta protección y es el motivo de su llanto.
· Conocer el entorno
Por otra parte, tener ratitos de estar despierto o despierta es lo que hace que empiece a conocer mundo, principalmente a través de la succión. Para ellos cualquier cosa es un gran estímulo, por eso no permanecen mucho tiempo seguido despiertos y necesitan mucho sueño para integrarlos.
En el capítulo del sueño de tu bebé ya vimos que todavía no diferencian el día de la noche, además sus necesidades siguen siendo las mismas durante las 24 horas. Por ello, suelen dormir el mismo tiempo ya sea de día o de noche.
Todo lo que pasa en tu bebé respecto al sueño los primeros meses de vida, está relacionado con su supervivencia.
EL SUEÑO DE LOS BEBÉS DE LOS 4 A LOS 7 MESES
“Durante los primeros meses el bebé prácticamente se despertaba solo para alimentarse. Ahora que puede estar más horas sin comer, seguro que se despierta mucho menos”.
Es lo que podemos llegar a pensar, pero la realidad no es esta. Se produce lo que se conoce popularmente como regresión de los 4 meses.
Cambios en esta etapa
Durante estos meses se produce un cambio en el inicio del sueño y ya no empiezan con el ciclo REM, si no que pasan primero al sueño no-REM (el de los 4 estadios). Por tanto, antes de dormirse profundamente deben pasar por los estadios I y II que son las de sueño ligero.
El ciclo total (no-REM + REM) ahora dura más, entre 60 y 90 minutos. Cuando termine el ciclo se producirá un despertar.
Estos cambios se producen con los meses y alrededor de los 6-7 meses el bebé ya tendrá todas las fases del adulto.
¿Qué podemos notar durante estos meses?
· Durante las noches se despierta cada hora u hora y media
Después de cada ciclo de sueño se producirá un microdespertar. La reacción que tendrá el bebé al despertarse depende de cada uno de ellos:
- Algunos hacen algún sonido y se duermen a los pocos segundos.
- Otros pueden estar más tiempo despiertos, llorar y necesitar la atención de los padres para volver a dormirse.
Ambos son completamente normales, se deben a su maduración y cada uno evoluciona de distinta manera.
Todavía están aprendiendo: a los 7 meses se producen unos ocho o diez despertares, en ocasiones se volverán a dormir solos y en otras llorarán.
Este hecho puede confundirse con una crisis de lactancia ya que los bebés amamantados reclamarán más, pero se debe a la organización del sueño.
· Se despiertan fácilmente al inicio del sueño
Este hecho se puede iniciar a partir de los 3 meses, pero muchos padres no le dan importancia. Cuando se une el hecho de los despertares frecuentes (a los 4 meses) es cuando empieza a preocupar.
Ahora el bebé debe pasar por los estadios de sueño ligero, esto hace que sea frecuente que al quedarse dormido o dormida cualquier sonido o cambio brusco durante los primeros minutos hace que se despierten y lloren.
El ejemplo más frecuente sobre este hecho es un bebé que se duerme en brazos y al intentar ponerlo en la cuna se despierta y llora.
· No duerme casi durante el día
Uno de los cambios notables desde los tres meses es que empiezan a dormir más hora durante la noche –no seguidas- y hacen varias siestas repartidas durante el día. Esto se debe a que ya se ha establecido el ritmo circadiano y, por tanto, diferencian el día y la noche.
EL SUEÑO A PARTIR DE LOS 8 MESES
“¿Ahora que ya tiene todas las fases establecidas dormirá mejor?”
Normalmente no es así. El reto más importante de esta etapa será superar la separación de los padres.
Ansiedad por separación
Alrededor de los 8 meses el bebé empieza a darse cuenta que es una persona independiente de sus padres. La separación de su cuidador principal o si éste desaparece de su vista, le genera angustia y llora ya que no entiende que es una separación temporal y no sabe si volverá. A esto se suma que no tienen una noción del tiempo establecida y no saben si ha pasado una hora o un día.
Esta ansiedad que le genera la separación también se manifiesta durante el sueño. Nos ponemos en el caso de un bebé que acostamos a las 20 horas y se ha dormido en brazos de mamá, sintiéndose protegido. A las 23:30 horas se despierta, está en su cuna y solo, sin ver a su madre y sin saber si está cerca o si va a volver.
Es normal que este bebé entre en una situación de estrés y llore. Otras respuestas comunes a esta ansiedad son:
- Llorar cuando el cuidador deja el cuarto.
- Negarse a dormir sin uno de los padres.
- Aferrarse al cuidador en el momento de la separación, por ejemplo agarrando la camiseta.
Les cuesta más dormirse o lloran durante la noche ya que sabe que se va a dormir y se separa de sus cuidadores, sin saber si estarán ahí cuando se despierte.
OTROS FACTORES
Son épocas de muchos cambios que pueden alterar su sueño:
- Empiezan a ser más independientes y eso les crea inseguridades por todo el entorno desconocido.
- La alimentación complementaria, aunque se haya iniciado antes adquiere cada vez más importancia y para ellos son muchos estímulos. Además, cambia el tipo de digestión y el cuerpo necesita adaptarse.
- Por la irrupción dentaria pueden estar más molestos e irritables.
RESUMEN
- Hasta los 3 meses de vida:
- Solo tienen 2 fases de sueño: activo y lento.
- Se despiertan normalmente por supervivencia: tener al adulto cerca para evitar peligros y poder comer.
- Durante los ratos que está despierto recibe muchos estímulos, por ello no permanecen mucho tiempo seguido despiertos y duermen mucho para integrarlos
- De los 4 a los 7 meses:
- Se empiezan a desarrollar las fases de sueño del adulto.
- Los ciclos de sueño duran entre 60 y 90 minutos, después de produce un despertar. El reto más grande durante estos meses es aprender a volver a dormirse después de cada despertar.
- Durante esta etapa:
- Se producen despertares muy frecuentes durante la noche, cada 60-90 minutos. En ocasiones pueden volver a dormirse solos.
- Se despierta fácilmente al inicio del sueño, ya que debe pasar por los estadios de sueño ligero y ante cualquier cambio se despiertan.
- Duermen menos durante el día.
- A partir de los 8 meses:
- Se produce la ansiedad por separación: si los cuidadores desaparecen de su vista empieza a llorar ya que no entiende que es temporal. También se manifiesta durante el sueño nocturno.
- Hay otros cambios que pueden alterar su sueño: la independencia, alimentación complementaria e irrupción dentaria.