¿Qué es el BLW?

Ahora son cada vez más familias que cuando se plantean cómo quieren iniciar la alimentación complementaria deciden hacerlo con el método Baby Led Weaning.

El BLW o “alimentación dirigida por el bebé”, resumido de una forma simple, es el método de alimentación en el que se le ofrecen alimentos sólidos al bebé desde el inicio de la alimentación complementaria (AC), éste lo coge con las manos y decide qué y cuánto comer.

Pero el BLW va mucho más allá, con este método se le da la oportunidad al bebé de que sea él o ella quien decide su alimentación, mejore la coordinación con las manos y explore diferentes texturas y sabores, todo ello evitando sobrealimentarle como ha pasado con la alimentación tradicional.

¿Es para todos los bebés?

Lo pueden practicar todos los bebés nacidos a término, sanos y con desarrollo psicomotor normal. En los prematuros se debe valorar individualmente, pero siempre atendiendo a la edad corregida de 6 meses y que cumpla los requisitos necesarios para poder iniciar que veremos a continuación. No se recomienda en niños con fallo de medro, dificultades neurológicas o motoras.

No es solo para los bebés que han tomado leche materna desde el nacimiento, aquellos que han hecho lactancia artificial también pueden practicarlo. Es verdad que normalmente los bebés de LM aceptan antes los nuevos sabores, pero eso no es un impedimento para poder realizar BLW con los de artificial.

Beneficios del BLW

• Es divertido. Todos los bebés son curiosos por naturaleza, les gusta explorar todo lo que le rodea y con este método tienen un papel activo en su alimentación lo que les hace aprender y que sea más entretenido. Se vuelven exploradores y disfrutan de la comida, tanto a corto como a largo plazo.
• Aprenden sobre los alimentos: olores, texturas, sabores diferentes.
• Activan los 5 sentidos: gusto, olfato, tacto, vista y oido.
• Pronto toda la familia come lo mismo, se le puede dar lo mismo que a los adultos pero adaptado. No hay que hacer dos platos cada vez.
• Aprenden a comer con seguridad: masticación, introducción de cantidades en la boca, gestionar diferentes tamaños y texturas dentro de la boca.
• Aprenden antes los movimientos motores y visuales:
  • • Agarrar alimentos con la mano, llevarlos a la boca, etc. Esto es la capacidad visomotora.
    • Dominar la fuerza: si aplasta mucho una zanahoria hervida se deshace, si aprieta menos consigue poder llevársela a la boca, alimentos resbaladizos.
    • Mejora motricidad fina de las manos (sirve para escribir, por ejemplo).
    • Masticar la comida fortalece los músculos necesarios para el habla.
• Seguridad en uno mismo: más confianza en sí mismo, no tendrá temor a probar cosas nuevas y se recuperarán rápidamente si las cosas no salen como esperaban.
• Participar en las comidas familiares: copiar actitudes, adoptar modales.
• Controlar el apetito.
• Mejorar alimentación: aunque parezca mentira los bebés tienden a escoger alimentos saludables si se les da la oportunidad. Menos posibilidad a largo plazo de comer siempre alimentos poco saludables, ya que les gusta todo. Para ello, los adultos debemos darle un buen ejemplo con nuestra alimentación.
• Actitud positiva hacia la comida, sin rechazos.
• Comer fuera de casa es más fácil.

Requisitos para empezar

Es importante que esté haya adquirido ciertas capacidades para poder empezar, nunca empezar si alguna de estas falla:

• Ha perdido reflejo de extrusión, el que hace que escupan todos los alimentos que no son líquidos.
• Es capaz de mantenerse sentado estable, sin usar las manos.
• Controla la cabeza erguida.
• Tiene interés en probar la comida.
• Es capaz de llevarse alimentos a la boca.
• Sabe demostrar cuándo tiene hambre y cuándo está lleno o llena.

Como estos ítems de la escala de desarrollo pueden variar en cada lactante, la edad de inicio de la AC debería individualizarse, pero no puede atrasarse más de las 26 semanas de vida (inicio del séptimo mes de vida).

¿Cómo prepararse para empezar?

Las semanas previas al inicio de la AC, puedes ir sentando a tu bebé en tu regazo. Al verte comer, probablemente le llame la atención la comida y pueda empezar a experimentar con los alimentos. No suelen meterse los alimentos en la boca, normalmente aplastan los trozos, los tiran o juegan con ellos. A pesar de ello, hazlo solo cuando sean alimentos adecuados para su edad ya que, si se los llegara a meter en la boca, no sería peligroso para él o ella.

Poco a poco, irá aumentando su interés en probar estos alimentos. En ese momento, probablemente, sea hora de empezar con el BLW.

Hay que prepararse para la suciedad, es innegable que el BLW es sucio. Esto es porque el bebé está experimentando con la comida y, al principio, la trata como a cualquier otro juguete: lo tira, espachurra, esparce, deja caer al suelo. A veces es accidental ya que se les cae de la mano por no dominar el agarre todavía, pero otras lo hacen con intención.

Por ello, es importante prepararse para la suciedad y buscar una forma que os sea cómoda y fácil de limpiar: el suelo se puede cubrir con papeles de diario, algún mantel:

• Los manteles tipo hule, son fáciles de limpiar y se puede usar, incluso, la fregona para hacerlo.
• Manteles de tela: puedes tener varios de estos para ir lavándolos. El beneficio que tienen es que se pueden sacudir y meter en la lavadora.

Al final es ir probando lo que te gusta más y te es más sencillo de recoger. Es importante tener antes preparado todo para la suciedad, para que luego os moleste lo mínimo posible.

Sobre el material, realmente no hay nada que sea imprescindible, ni la trona. Hay madres y padres que prefieren que el bebé esté en su regazo, por ejemplo. Te damos algunas ideas sobre materiales y puedes escoger que crees que es necesario:

• La trona, como hemos visto no es necesaria pero puede ser de ayuda para no tenerle siempre encima y, además, el bebé se puede sentar bien recto que es esencial para el BLW. Si la trona lleva una bandeja incorporada, es mejor que ésta sea ancha y tenga reborde ya que así menos alimentos irán a parar al suelo.
• Hay diferentes tipos de baberos, lo importante de ellos es que no estorben al bebé y éste se pueda concentrar en la comida. Hay unos de silicona o plástico con un bolsillo para recoger los trozos que le caen y así hacer menos suciedad, pero estos suelen ser más rígidos e impedirle los movimientos. También se pueden usar tipo con mangas o “babi” escolar impermeable, las ventajas de estos es que se ensucian menos las mangas de la ropa pero al principio hay que vigilar que éstas no le queden muy largas y le dificulten explorar la comida.
• Los platos no son necesarios al principio, pueden ponerse los alimentos directamente en la bandeja o la mesa, para evitar que juegue más con el plato que con la comida.
• Los cubiertos de momento tampoco son necesarios ya que usan las manos para alimentarse, más adelante se pueden usar cucharas y tenedores de plástico para que el bebé pueda comer tipo purés o sopas, o si vemos que quiere imitar como comemos los adultos. Respecto a las precucharas puede que sean útiles con alguna comida, pero no son estrictamente necesarias.

Errores principales al inicio del BLW

El BLW es un cambio en el concepto que hasta ahora teníamos sobre la alimentación de los bebés. Todos y todas hemos visto este momento como un cambio de leche por papillas, en la que los bebés se terminaban todo lo del plato.

Ahora es momento de cambiar esta visión que tenemos sobre la AC, para que ésta no se convierta en una batalla. Verás que muchas de las recomendaciones ya se han comentado o se comentarán en algún otro capítulo pero es importante que las recuerdes y las tengas siempre en mente:

• Hasta el año de vida su alimento principal es la leche y le ofrece todas las calorías y nutrientes que necesita.
• No esperes que coma grandes cantidades, le toca comer poco y experimentar mucho.
• Nunca le fuerces a comer ni a terminarse el plato, él o ella decide qué y cuánto.
• Ofrécela en momentos en los que no tenga hambre ni sueño.
• Deja que juegue/experimente con los alimentos.
• Puede que demuestre más interés en los alimentos si le sentamos con los adultos, a ser posible con los mismos alimentos.
• Dar ejemplo con nuestra alimentación.
• Evitar distracciones: televisión, juguetes, platos y manteles con colores chillones. Hay dos motivos principalmente: puede que no demuestre interés en los alimentos y, si tiene alimentos en la boca y no tiene toda su atención en ellos, podría convertirse en un riesgo muy alto de atragantamiento.
• No dejes de darle un alimento si no le gusta a la primera: pueden probarlo unas 8 veces hasta que les gusta.
• No tengas prisa para que coman, van más lentos que los adultos.